I
magine que cogemos a cada uno de los personajes más aborrecibles del universo Tarantino, con toda la abominable brillantez que cada uno sumaría a esa ecuación, y los encerramos en una misma habitación durante tres horas… vestidos de vaqueros. Pues el director ha elegido esa descabellada idea como eje central de su nueva, octava y última película.
The Hateful Eight (Los Odiosos ocho o los Ocho más odiados) nos transporta al Wyoming de una temprana posguerra civil americana. Una terrible tormenta de nieve será la que consiga juntar a los ocho protagonistas (y casi únicos individuos que salen en la cinta) entre las mismas cuatro paredes.
Con la certeza de que va a acabar mal, Tarantino lanza desde el principio la incógnita de quién será el primero en caer. En su segundo y consecutivo western (género que ha decidido reexplorar tras Django Unchained) nos presenta al cazarrecompensas John The Hangman (Kurt Russell) viajando hacia Red Rock con una misión muy simple, pero no por ello sencilla: ajusticiar a su prisionera, Daisy Dormegue (Jennifer Joson Leigh).
En su camino pronto se encuentran al ex soldado Marquis Warren (Samuel L. Jackson) un negro caradura especialista en salvar la propia vida y acabar con la ajena. A unos kilómetros, el nuevo sheriff de la ciudad a la que se dirigen, Chris Mannix (Walton Goggins), se une para formar cuarteto dentro del coche de caballos que conduce O.B (James Parks) y que, debido al infierno blanco de ventisca y muerte segura, debe parar y obligarlos a hospedarse en la mercería de Minnie, donde les esperan Bob el Mexicano (Demian Bichir), Oswaldo Mobray (Tim Roth), Joe Cage (Michael Madsen) y el general Sanford Smithers (Bruce Dern).
Y a partir de ese punto se desarrolla este macabro relato dividido en cinco capítulos de paranoia argumental, un cuento sin moraleja, una suerte de gran hermano en el que el premio es conseguir salir vivo de ahí. Un spaghetti western con conciencia política y racial, cigarrillos Red Apple y diálogos tan largos como necesarios conforman una cinta de resultado tan obvio como inesperado.
Tampoco es que podamos decir que éste será el nuevo Clásico (así, con mayúsculas) de Tarantino, pero no nos deja indiferentes. Ni tampoco la filmación del director de fotografía Robert Richardson en Ultra Panavisión 70 (un formato prácticamente muerto); la banda sonora de Ennio Morricone; o que la película más parece una obra de teatro, tanto por tempo como por la forma de plantear los espacios, que un film.
Una cinta que no aburre, aunque quizá sí haya extendido su duración más allá de lo necesario. Cazurros, asesinos con extremada educación. Tensión y, por supuesto, sangre y vísceras. Tarantino en esencia pura.
Los odiosos ocho
· Año: 2015
· Duración: 167 min.
· País: Estados Unidos
· Director: Quentin Tarantino
· Guión: Quentin Tarantino
· Fotografía: Robert Richardson
· Música: Ennio Morricone
· Reparto: Samuel L. Jackson, Kurt Russell, Jennifer Jason Leigh, Demian Bichir, Walton Goggins, Tim Roth, Bruce Dern, Michael Madsen, James Parks, Dana Gourrier, Zoë Bell, Channing Tatum, Lee Horsley, Gene Jones, Keith Jefferson, Craig Stark, Belinda Owino